El Día Internacional de los Trabajadores y las trabajadoras es una fecha cargada de simbolismo y significado, el 1 de mayo nos recuerda que los derechos laborales, hoy reconocidos, no siempre han sido una realidad, y que se han obtenido gracias a la valentía y determinación de quienes han dejado su huella en la historia.
En mayo de 1886, después de varios días de protestas y enfrentamientos violentos con la policía, se convocó a una manifestación pacífica en la Plaza Haymarket de Chicago, la que fue interrumpida por una explosión y un enfrentamiento con la policía, lo que resultó en la muerte de varias personas manifestantes y policías.
El 1 de mayo de 1889, en París, se llevó a cabo el Congreso de la Segunda Internacional Socialista, en el que se decidió que el 1 de mayo sería el Día Internacional de los Trabajadores, en honor a quienes habían participado y caído en Chicago.
En este 1° de mayo de 2023 considero oportuno reflexionar sobre el avance de la inteligencia artificial en los ámbitos laborales, como tecnología que está transformando el mundo del trabajo a una velocidad que no habían tenido otras evoluciones de las formas, ni de los ámbitos laborales. La evidente eliminación de puestos de trabajo, que antes eran realizados por humanos, puede ocasionar desigualdades y desempleo, afectando negativamente los derechos laborales.
Esta posibilidad exige poner a disposición de los humanos capacitaciones que los preparen para asumir los nuevos puestos de trabajo, y el compromiso ineludible de gobiernos y empresas para implementar políticas y medidas que garanticen la capacitación y la reubicación frente a la pérdida del empleo por el avance de la inteligencia artificial en la organización empresarial.
El desafío actual, en la lucha por los derechos de la persona humana en condición de trabajo, se encuentra situado en la necesidad de trabajar en forma conjunta con los gobiernos, empresas y organismos internacionales, para lograr una adecuada incorporación de la inteligencia artificial en el ámbito laboral, con pautas que garanticen la adopción de medidas de protección de la persona humana, y fomenten un ambiente laboral justo y equitativo en el que la tecnología, trabajadoras y trabajadores coexistan en armonía.